El helado como medicina emocional

visualhunt.com

El helado se considera tradicionalmente un producto nocivo. Sin embargo, tiene muchas propiedades útiles. Incluso el legendario médico Hipócrates, el “padre de la medicina”, aconsejó comer “crema helada”, que, en su opinión, mejora el bienestar. Y resulta que tenía razón en muchas cosas.

El helado es muy saludable, según la Asociación Británica de Investigadores en la Aplicación de la Ciencia en el Campo del Entretenimiento. Estimula la producción de una sustancia especial en el cuerpo: la serotonina, que se cree que puede mejorar el estado de ánimo. Los estudios han demostrado que quienes disfrutan del helado a menudo se sienten más felices que quienes no lo hacen.

El helado como medicina emocional

pixabay.com

Y un estudio reciente mostró que el helado regular es un gran calmante para el estrés.

Esto se explica porque la leche o crema de la que se elabora contiene L-triptófano, un tranquilizante natural muy eficaz que mejora el estado de ánimo y calma el sistema nervioso. Los científicos señalan que esta sustancia incluso ayuda a sobrellevar el insomnio.

Además, el helado se puede utilizar como agente hemostático rápido y eficaz para las hemorragias nasales, que son frecuentes en el calor del verano. Basta con tragar unos cuantos helados muy fríos, y la sangre pronto se detendrá.

Según los científicos, cuando los adultos comen helado, también hay un efecto terapéutico adicional asociado a las emociones positivas, porque el helado nos recuerda la infancia y sus alegrías.

El helado como medicina emocional

pixabay.com